29 de junio de 2008

EL BAILE MÁS SUCIO...

Corría el año 1987 y una película revolucionaba el género musical (a mí me parece de género musical aunque no cante nadie, su BSO es ya mítica y hasta ganó el Oscar a la mejor canción original) y revolucionaba también el cine de adolescentes desde el subidón de "Grease" a finales de los 70. El título, que afortunadamente no se tradujo al español, nos trajo algunos quebraderos de cabeza a las que por aquel entonces no dominábamos el inglés, porque al mirar en el diccionario el significado, aquello de "Baile Sucio" sonaba algo extraño.
Yo debía ser de las pocas niñas de la época que sabiendo de su existencia, no la había visto. Mi amiga Clari me la había recomendado muchas veces y su manera más sabia de convencerme del todo fue venir directamente con la cinta VHS a casa. Tarde tonta de invierno, sin grandes planes en perspectiva (como la mayoría de tardes de sábado) y una película en el vídeo. Lo malo de verla con alguien que ya la ha visto, es que te jode algunos buenos momentos, pero aún así mereció la pena. Genial el momento en el que "Baby" (nombre en la peli de la protagonista) entra en la "zona prohibida" o lo que es lo mismo, la zona donde se reúnen los currelas a darse el gustazo de ser como son, lejos de las miradas críticas de los huéspedes. Con la canción DO YOU LOVE ME de fondo, los bailarines sacan la artillería pesada. O mejor lo vemos....

Me acuerdo aún de los músculos de Patrick Swyaze en la escena en la que le está enseñado a bailar (bueno, en una de tantas)y cómo caímos todas enamoradísimas de este chico, conocido ligeramente por películas como "Rebeldes" o la serie "Norte y Sur".
La banda sonora, editada entonces en vinilo, se hizo en dos entregas, "Dirty Dancing" y "More Dirty Dancing". Me hice adicta a esa música desde entonces y al día de hoy, siguen siendo parte de mi banda sonora. Cabe destacar que "The Time of my Life" ganó el Óscar a la mejor canción (y curiosamente no la considero la mejor de la película), pero hay otras muchas que sean o no de los 80 propiamente dichas, siempre las asociaré a esta época gracias a este clásico ya del cine de adolescentes.

22 de junio de 2008

A PROPOSITO DE HENRY (WALTON JONES JR, AKA INDIANA JONES)

Hace tiempo se estrenó la cuarta parte de la saga de Indiana Jones.....Y tengo que confesar que a mí el Indiana que me va es el madurito y  no el sesentón, el de sus inicios, con aroma a película ochentera (si no no estaríamos defendiéndola en esta blog) y con historias sin espectaculares efectos de ordenador.

Por si la memoria falla (o mezclamos los argumentos de una con otra), un pequeño recordatorio realizado con la inestimable ayuda de los amigos de la Wikipedia)

En busca del arca perdida (1981)
Indiana Jones es contratado por el gobierno estadounidense para localizar el Arca de la Alianza, antes de que los nazis la encuentren y se vuelvan invencibles, tal como el relato de los israelitas en el Antiguo Testamento. Los nazis cuentan con la ayuda del rival de Jones, el arqueólogo René Belloq. Con la ayuda de sus amigos Marion Ravenwood y Sallah, Indiana logra encontrar el Arca en Egipto. Al final, el Arca es llevada a América en donde se guarda en un almacén secreto.

Indiana Jones y el templo maldito (1983)
Indiana Jones escapa de gangsters chinos, con la ayuda de la cantante y actriz Willie Scott y un niño oriental de 11 años de edad, al que Indiana llama Tapón. Después, Indiana llega a un pueblo de la India, en donde se entera que los niños han sido secuestrados durante algún tiempo por una secta secreta, integrada por adoradores de la diosa Kali. Su líder, Mola Ram, es el principal responsable de la desaparición de los niños y de las rocas Shankara con las que busca hacerse invencible y apoderarse del mundo. Indiana consigue rescatar a los niños, para regresar con las piedras al pueblo de las que fueron robadas.

Indiana Jones y la última cruzada (1989)
Indiana Jones es contratado por el empresario estadounidense Walter Donovan para encontrar el Santo Grial. Para su nueva misión, Indiana es apoyado por la doctora Elsa Schneider, poco antes de enterarse que su padre desapareció sin dejar rastro alguno. Sin embargo, Donovan y Elsa están relacionados con los nazis, siendo ellos quienes secuestraron al padre de Jones para obtener información acerca de la localización del Grial.Ah....Indiana Jones y sus maravillosas copias en VHS pirateadas del vídeo comunitario que me tragaba una y otra vez (al igual que hacía con Los Goonies, también de Spielberg). Aunque en aquella época Harrison Ford no entraba en mi prototipo de chico ligable (se salía por muchos años del canon) me gustaba mucho.
Otros que me gustaban mucho (y ya les dedicaré toda una entrada a ellos solitos) eran los Hombres G, que por aquel entonces intentaba derribar el mito con su canción Indiana, con una letra divertida y que demostraban que incluso ellos no eran indiferentes a las aventuras del arqueólogo-historiador (o lo que quiera que fuese en realidad el Dr. Jones).


Todo un clásico por partida doble, gracias a dos gurús de los ochenta: Steven Spielberg y los Hombres G

11 de junio de 2008

JUEGOS REUNIDOS (GEYPER)


Otro de los clásicos de los 80. Yo nunca los tuve, pero mi vecina sí y al final, en aquellos años, que lo tuviese una amiga era como si lo tuvieses tú misma. Sobretodo porque mi amiga Loli y yo pasábamos tantas horas juntas que había hasta quien nos tomaba por hermanas.
Normalmente nosotras éramos más de Nenucos, Nancys y (más tardíamente) de Barbies, pero de vez en cuando nos daba por los juegos de mesa (extraño nombre para nosotras porque normalmente una mesa era el último lugar donde se nos ocurriría sentarnos a jugar). Recuerdo tardes y tardes sentadas en el suelo de su habitación, o en la terraza acristalada, sacando las fichas, echando a suertes qué juego tocaba y cómo lo íbamos a jugar. Sí, ya sé que traía su buen tocho de instrucciones  pero a nosotras nos daba igual, eran en algunos casos demasiado elaboradas, así que nos inventábamos (siempre de mutuo acuerdo, para no pelear luego) las reglas y el juego. Había algun@s afortunad@s que eran la envidia del barrio por tener la "versión" de 45 juegos, cuando lo más común era la de 10 o 15. Aunque también conocí a compañeras de colegio que tenían la de 25.Sus juegos muchos y variados: los clásicos como la Ruleta (cuando estuve en Las Vegas todo un alúd de recuerdos me vino de maravilla para echar unas partidas), el Parchís, el Tres en Raya. Las Ratas, La Oca, las Damas, el Ajedrez...

Yo nunca soñé con tener este juego en la noche de Reyes, quizá porque tenía uno a mano siempre que quería. A veces me gustaría volverme a sentar con Loli (ahora ya es Lola, los años no pasan en balde) y echarnos unas partidas. Seguro que ahora nos acabaríamos aburriendo. Pero en aquel entonces era otro de nuestros modos de fantasear. Y eso sí que tiene valor.

6 de junio de 2008

ERASE UNA VEZ...EL HOMBRE


Érase una vez el hombre. Uno de los mejores dibujos animados no sólo de los 80, sino de la televisión en general. Eran muy didácticos y a estas alturas recuerdo muchos hechos históricos por esta serie y no por los libros del colegio.

La canción de la cabecera ha sido cantada por varias generaciones (normalmente y con frecuencia en noches de farra, en el apartado de cantes populares) con una letra pegadiza y a veces difícil de memorizar, pero que tod@s nos sabemos.

Luego tuvo una segunda parte (más moderna ya) llamada "Érase una vez ...la vida" donde siguiendo el mismo esquema nos enseñaba el fascinante mundo que se esconde dentro del cuerpo humano. Los personajes eran los mismos y en esta ocasión los malos-malísimos de la otra serie encarnaban los virus, bacterias y todo aquello que se pudiera asociar con los males del organismo. Ahh.....qué de recuerdos!!